sábado, febrero 23, 2008

golondrinar golondrinar, nuevos capítulos de la saga abordo del ají gigante trasandino...

VIGÉSIMO OCTAVO PASO
El martes, Pampero y Pelado bajan al centro de Pichilemu por unos trámites. Dos nuevas golondrinas nacen: "Cadáveres exquisitos" y "Bollitos golondrinos de papel". Almuerzo, despedida, se van la Paxy y la Vane, más tarde se va el Cris. Los cinco que han quedado, Michel, Pablo, Julio, Pelado y Pampa, ya entrada la noche bajan todo maquillados. Al pueblo van, tocando músicas de camino y llamando la atención de los vecinos. Se instalan delante de farmacia y performan presentación estelar del circo imaginario. Canciones, malabares, teatro, juegos con la gente. Dos pacos (carabineros) arremeten con su verde prepotencia, la dueña de un negocio ha encontrado peligrosos a los cinco radiobembos. La gente alerta buenaonda y los maquillados se hacen humo. Al rato repiten performance en una plaza. Ya es medianoche, la recaudación se reparte equitativamente y antes de que cierren la botillería (lugares autorizados para el expendio de bebidas alcohólicas), tres vinos y un jugo grande. Unas papas fritas y la playa "puntilla" como destino. Luna enorme, varios fogones. Guitarra, bidón, canciones. A las seis empieza la vuelta a casa. Michel se queda cantando raggamuffin' con los Shamanes hasta las diez.

VIGÉSIMO NOVENO PASO
Último almuerzo en casa de tía de Michel, último almuerzo en Pichilemu. Jurel, papa y salsa. Nos separamos los circoimaginario en dos equipos: argentinos (pampa y pelado) y chilenos (michel, julio y pablo). "Nos vemos en Curicó". El grupo que llega primero, llama al compañero. Luego vendrán Chillán, Concepción, Chiloé. Eso es lo previsto, al menos.

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