martes, marzo 31, 2015

H.I.J.O.S. celebra 20 años con el 14° Congreso Nacional en Embalse Río Tercero

Entre el 2 y el 5 de abril, las regionales de todo el país, y las internacionales de Barcelona y México de la agrupación H.I.J.O.S. (Hijos por la Identidad y la Justicia contra el Olvido y el Silencio), se reunirán en la cordobesa localidad de Embalse Río Tercero, para desarrollar el 14° Congreso Nacional de la Red Nacional.

A través de una gacetilla, titulada "H.I.J.O.S. 20 años en lucha", la Red Nacional explica que la agrupación se reúne en este tipo de congresos para discutir, consensuar y profundizar las líneas políticas que definen la lucha por la profundización y defensa de las políticas públicas en materia de Derechos Humanos. En este marco, anticipan que tras el encuentro en Embalse, redactarán un documento donde darán cuenta del posicionamiento político de la agrupación.

EL ESCRACHE CONTRA EL OLVIDO Y EL SILENCIO
“H.I.J.O.S. nació el 14 de abril de 1995 en el Complejo San Miguel, en la ciudad de Río Ceballos de la Provincia de Córdoba”, precisa la gacetilla, motivado "por la lucha contra la impunidad, el juicio y castigo, la búsqueda de nuestros hermanos apropiados, reivindicando la lucha de nuestros padres y manteniendo viva la Memoria". A propósito de los veinte años que cumple la agrupación, manifiestan: "Nos unieron y nos unen motivos que tienen que ver con nuestra historia como país, con cambiar nuestra realidad y con seguir construyendo una patria más justa, libre y soberana".
El contexto de nacimiento de H.I.J.O.S., encontraba al neoliberalismo en pleno apogeo en nuestro país, con Carlos Saúl Menem, a poco de ser reelegido presidente. Con las leyes de Punto Final, Obediencia Debida y el Indulto, proponiendo la teoría de los dos demonios y una falsa reconciliación, como contrapunto a la lucha por el esclarecimiento de los crímenes del terrorismo de Estado en Argentina, ocurridos durante la última dictadura. Recuerdan en la gacetilla: "Convivíamos en un país donde los genocidas vivían en nuestro barrio, caminaban por las mismas calles que nosotros, vivían en completa impunidad amparados por el poder político, mediático y económico que los ocultaba". Frente a una Justicia que caminaba "a contrapelo de la historia", la herramienta de lucha que encontraron estos hijos de desaparecidos y víctimas del terrorismo de Estado fue el escrache.
En la página web de H.I.J.O.S. Capital, manifiestan que la mayor parte de los represores de la última dictadura, "son desconocidos para la mayoría de la gente, así que gozan de una tranquila impunidad". En ese marco, explican: "Con el escrache queremos hacer pública la identidad de estos sujetos: que los compañeros de trabajo conozcan cuál era su oficio en la dictadura, que los vecinos sepan que al lado de su casa vive un torturador, que los reconozcan en la panadería, en el bar, en el almacén". Decían en aquella definición que, ante la falta de Justicia, los escraches pretendían generar una "condena social, que se los señale por la calle como lo que son: criminales".

EL NUEVO ESCENARIO DE LA MEMORIA, LA VERDAD Y LA JUSTICIA 
Según un relevamiento de la Procuraduría por Crímenes contra la Humanidad, a cargo del fiscal general Jorge Auat y la coordinación de Carolina Varsky, entre 2006 y el 18 de marzo pasado, son 563 las personas condenadas en los procesos judiciales por crímenes de lesa humanidad en todo el país, con 16 juicios en curso y 120 causas próximas a debate.
H.I.J.O.S. es querellante en decenas de estas causas y, de veinte años a esta parte, viene reforzando los escraches con protagonismo en los desafíos que imponen estos nuevos tiempos de juicios por crímenes de lesa humanidad y condenas a los genocidas. Expone la gacetilla citada: "Seguimos luchando por la cárcel común, perpetua y efectiva para todos los genocidas de la última dictadura cívico-militar, sus cómplices, instigadores y beneficiarios. Además acompañamos a nuestras Madres, Abuelas y Familiares en la búsqueda de nuestros hermanos apropiados, participamos activamente en las Comisiones de Memoria recuperando los ex Centros Clandestinos de Detención Torturas y Exterminio (CCDTyE) y transformándolos en Espacios de Memoria, así como conformando espacios de educación y pedagogía para trabajar con las escuelas, los estudiantes y los docentes en las trasmisión de nuestra historia reciente".

FOTO: del Encuentro Nacional de H.I.J.O.S. 2014 (del Facebook de HIJOS Capital)