Cositas del Taller Literario Panadero

Imaginación

por Vicente Alexandre (Alejandro Milocco)

de Antología Poética II -negra-

Poetas Panaderos

La madre se esforzaba a creer en la virginidad de su hija. El padre soñaba con enterarse el crímen del himen, para poder matar al reproductor de esperma. El emocionado novio, pensaba durante semanas en algún rincón iluminado donde proyectar en sombras sus cuerpos. El amigo del novio fantaseaba con un relato que lo arrime al genérico acto sexual. La amiga de la novia rogaba por dichosa acción para sentirse más blanca ante sus padres. La mucama de la casa de la novia sólo pensaba, mientras limpiaba los pisos, que su hija no quede embarazada nuevamente. La joven niña, hija del padre y la madre, novia del novio, amiga de la amiga, conocida del amigo del novio, patroncita de la mucama, pensaba que su cuarto tendría que cambiar de color.

NOVIEMBRE 2004

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Contraimaginación

por Pablo Rodríguez

"...que sea beige. Beige me gusta. Beige es el cofrecito que me regaló Matías. ¡Cómo lo amo a Matías!... ¿Tendré que entregarme a él por fin, como me dijo Solange?... No, papá lo mataría... y mamá... ¡Qué decepción sentiría mamá, espejito!... Yo sé que Matías no es como su amigo Raúl, ése que siempre anda con revistas chanchas, pero pienso en Rosita y en su hija, tan jovencita y ya con tres chicos y me da miedo... ¿Y si yo quedo embarazada en mi primera vez?. En fin, diario íntimo, creo que estos colores Rebelde Way ya no van conmigo, creo que estoy cambiando, que tengo que crecer y verme más sobria y seria, creo que el beige quedaría bien para mi cuarto".

DICIEMBRE 2004

Cronista de guerra informando (lo) que no ve

corresponsal de guerra quiere contar cómo está viviéndose la fiesta de la antología de literatos panaderos en Paraná... quiere mostrarle a los lectobloggers qué es lo que está pasando allí, cómo se está desarrollando... pero el corresponsal de guerra siente mucha pena por no estar ahí; entonces, a diferencia de otras veces, esta vez no, esta vez no mentirá... esta vez le duele demasiado no estar como para mentir y contar falsedades a la distancia virtual del lectoblogger... esta vez el corresponsal de guerra se ubicará como espectador a la espera, querrá ser quien reciba de sus corresponsales, a su vez, de sus literatos panaderos, un algo que diga qué es lo que está pasando... el corresponsal de guerra esta vez estará lejos de las balas, lejos del ruido... lejos del acontecimiento... entre hechos irrelevantes, hechos que no considera tan importantes en este momento, sumirá su necesidad y su dolor en un texto de pedido y de reclamo... que los literatos hagan un esfuerzo singular, que se dignen a volverse meta corresponsales, que intenten volver palabras lo que las ausentes pícaras imágenes no quieren decir... nada más por el momento