"No hagan la estupidez que hacen los resultadistas, las oportunistas de la hora. No cometan el asesinato. Maravilla Martínez, retirado o no, es un fuera de serie. Si su carrera como boxeador tuvo fin en la noche de anoche, si eso fue todo, fue mucho más de lo que un boxeador argentino, hace años, imaginábamos podía darnos, iba a darles a los carniceros de la hora: siempre espectadores de la vida. Hace dos años ninguno de los que no siguen el boxeo, casi ninguno de los que lo siguen, sabía de Martínez, del potencial de Martínez. Ahora resulta que muchos se sienten en el lugar de juzgar la derrota. Yo siento dolor como argentino y amante del boxeo. Tengo corazón y nunca voy a usarlo para matar a un boxeador por un capricho, la mala lectura de los desaforados de la victoria. Gen argento si los hay: amar al ganador, fusilar al caído, pisarlo, golpearlo en el suelo. No me voy a sumar nunca a esa tiradera. Fui feliz viendo a Maravilla Martínez muchas noches de sábado, muchas veces me curó de la soledad, como los boxeadores. Me debo haberlo visto en vivo, desplegando su fuerza. Lo que haga de ahora en más se lo tiene ganado, merecido, no tiene que pedirle permiso a nadie. Los odiadores de la hora, los despatriados de siempre, no son nadie para juzgar a Martínez. Si no van a sonreír por lo dado, que callen."
Del facebook de Matías Barnes, acerca de la pelea que Maravilla Martínez perdió con Cotto.
Foto: Télam:
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